Sesiones de juego. Florencia, At the Gates of Loyang, In the Year of the Dragon y mas...

Mediocre mes de Marzo. Al ser un mes con 5 fines de semana prometía convertirse en uno de los prolíferos del año, pero no ha sido así. Por circunstancias ajenas al protagonista, todo se concentró en la primera quincena del mes (los tres primeros fines de semana) siendo la última quincena un periplo por el desierto. 

Florenza

En nuestra única Frikikedada del mes epigrafiado, nos reunimos sólo 3 jugadores. El Empalador llevaba tiempo insistiendo, rozando lo cansino, probar las mieles y virtudes de Florencia. Eso fue lo que hicimos.


Decir que estamos ante un juego de primera división dentro de la avalancha de juegos de colocación de los trabajadores que nos ofrece el mercado. De tema agradable, arte gráfico elegante y notable cantidad y calidad de materiales, debemos disponer de gran espacio en la mesa y de 3 horas de juego como mínimo. 

Florenza tiene mi punto dulce de complejidad y la interacción entre jugadores. Los dados ruedan con los maestros artistas para dilucidar cuan magna es la obra creada, algo que no molesta en absoluto y es realmente divertido.

Estamos ante un mueve cubos clásico, pero uno de los mejores que he tenido el privilegio de probar en este campo. Me gustan muchas cosas. Podemos hacer un montón de acciones e incluso reservarnos algunas para el siguiente turno. Construir edificios de producción o gestión en nuestro barrio, embellecer nuestro palacio o capilla familiar, realizar obras de arte, contratar a predicadores para conseguir trabajadores extras, etc. Además si eres el Capitán de la guardia puedes "detener" a un trabajador adversario o artista, si eres el obispo puedes "convertir" a un trabajador del oponente en propio. Vamos que tenemos de todo. Uno de mis Top Ten.


Gonzaga

Después del Florencia le dimos a un sencillo juego con mecánicas y elementos interesantes, Gonzaga. Este es un juego extraño. Primero destacar los intentos loables del diseñador por hacer algo fuera de lo común. Lástima que dichos intentos no hayan llegado a buen puerto ya que original el juego lo es. 


Las piezas hexagonales de plástico son interesantes, pero el juego es simplemente soso. Sensaciones de poco control en la partida son una constante. Su carencia de tema lo hace abstracto como el agua destilada, incolora, inodora e insípida. 

Lo mejor que puedo decir del juego es que hay que probarlo para saber que no te gusta. Otro punto que destaca es que estéticamente es resultón. Me desagradan los juegos familiares de corta duración con un puntito de azar si estos son divertidos y amenos, pero es el caso Las pocas decisiones que nos ofrece por turno y el factor suerte moderadamente alto, simplemente me dejó frío. A lo mejor es que no me gustan los juegos con componente de rompecabezas. Un juego sin pena ni gloria.


Fantasma Blitz


Para finalizar la sesión un grato descubrimiento. Fantasma Blitz, un juego muy divertido. Es como Jungle Speed (con arte más infantil) pero que obliga a pensar y a invertir más tiempo a la hora de coger los tótems. Esto añade diversión y re-jugabilidad. Se puede jugar con los niños o con cualquier persona que quiera entrenar la agudeza y rapidez de pensamiento. Lo recomiendo.


At the Gates of Loyang


Partida a dos con mi mujer. Gran juego de cartas y gestión de recursos del cual poco puedo aportar que no haya hecho ya en esta reseña. Una partida divertida y ágil al conocer los dos el reglamento, las consultas fueron escasas. Partida muy ajusta que simplemente se decanto a mi favor por un error no forzado de mi contrincante. Sin ese error la victoria hubiese premiado al mejor jugador.


In the Year of the Dragon


Otra partida a dos con mi mujer. Primera partida para ella y la enésima para mí. Lo jugamos en plan tutorial y comentábamos cada jugada para vislumbrar las posibilidades que tiene el juego. Espero volver a jugarlo, pero esta vez con menos benevolencia. 

Básicamente es el mejor juego de gestión de crisis al que he jugado. Un error es fatal, se convierte en un lastre que afecta al resto de la partida, muy difícil remontar. Es difícil encontrar euros que sean tan implacables con los errores o la falta de planificación. El diseño que tiene te hace sentir como si estuvieras jugando contra el juego y no contra los jugadores. Tiene una mecánica para designar el orden de turno que simplemente es una obra de arte. 

He visto ganar a jugadores desde la parte delantera, como de la trasera, en el track de orden de turno. Sin embargo, es mucho más difícil y requiere una habilidad especial jugar y ganar desde la parte posterior. Espero que le haya gustado y que este sea el principio ya que a mí me maravilla.


Mr. Jack Pocket


Se necesita jugar varias veces para vislumbrar las posibilidades que tiene de este minijuego, siendo más difícil de jugar como Jack en las primeras partidas. Sin embargo, al cabo de poco tiempo, nos encontramos con un juego de cábalas ligeras y divertidas, donde se sufre la sensación de persecución al poco tiempo. Además, su portabilidad y buena producción lo hace ideal para viajes.




No podían faltar las sobremesas domingueras de Dominó, juego deductivo y matemático. Dominó no es azaroso como se pueda creer en un principio, aunque malas fichas iniciales hacen muy cuesta arriba la remontada. Es un juego de engaño, deducción y a veces de riesgo. 



El jugador conoce su información y lo con la que juegan los demás en la mesa. Debemos deducir quién tiene qué y cuándo jugar lo que se tiene. Especialmente hay que jugar a favor de la pareja de juego para facilitar su juego si es líder o provocar el pase, si el líder es algún jugador de la pareja contraria. Concepto difícil de asumir por mi suegra y que es objeto de frustración para la incondicional de su hija. 


Y para concluir las inevitables partidas al insufrible uno con mi primogénito. Hay mejores juegos abstractos de cartas que el uno. Este tiene demasiada suerte y mínima estrategia. Realmente es surrealista creer que se ha ganado o perdido por razones distintas al puro azar... no hay casi nada de divertido en este juego excepto la sonrisa de Héctor cuando gana. 



No sé porque extraña razón, solo se me ocurre un castigo de los dioses, es uno de sus favoritos. Tierna ignorancia. 

Como siempre, lo mejor de todas estas sesiones lúdicas es la compañía. Esto ha sido todo por este mes, si te gustó puedes votar aquí.